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Jun 03, 2023

¿Aún no ha encontrado la silla adecuada para la oficina en casa? Este consejo experto podría ayudar

Para muchos canadienses, trabajar desde casa es más que una realidad temporal

Para muchos canadienses, hacer un trabajo desde casa es más que una realidad temporal provocada por la pandemia; en cambio, es el camino a seguir para el lugar de trabajo. Si se encuentra entre aquellos deseosos de mantener una configuración de oficina en casa funcional y cómoda, es importante que mire mejor su silla.

Según Linda Miller, profesora de la facultad de medicina de rehabilitación de la Universidad de Alberta y Roxanne Azoory, presidenta de la división ortopédica de la Asociación Canadiense de Fisioterapia, el uso a largo plazo de una silla que no le brinda el apoyo adecuado puede causar problemas de salud. Estos son algunos consejos para asegurarse de que tiene una silla que está haciendo su trabajo, para que pueda hacer el suyo de manera efectiva.

Hay diferentes formas de saber si una silla necesita ser reemplazada. Algunos ejemplos enumerados por Azoory incluyen si la silla está rota y no se puede ajustar, o si ya no se siente cómodo en ella durante una jornada laboral de ocho horas. Quizás llevas meses pensando en hacerte con uno más ergonómico. Cualquiera que sea la situación, hay características clave que buscar en una nueva.

"Siempre elegiría una silla de oficina más tradicional [para que] realmente puedas ajustar el ángulo y la altura, y tengas la capacidad de bloquearla en su lugar para que puedas obtener un buen apoyo", dijo Miller. Las opciones de moda, como las sillas de bola, explicó, pueden crear mucha inestabilidad en el asiento, lo que causa problemas con el tiempo.

La característica más importante es una altura ajustable, dijo Miller, seguida de un respaldo adecuado. "Algunas personas están trabajando en una mesa de comedor. Otras personas están trabajando en un escritorio real", dijo. "Tener la capacidad de ajustar una silla a la altura adecuada se vuelve realmente importante". También es crucial, añadió, que la parte baja de la espalda, llamada zona lumbar, tenga apoyo porque la mayoría de las personas no pueden sentarse erguidas durante períodos prolongados sin algún tipo de apoyo.

Si la silla que está mirando tiene un reposabrazos, dijo Miller, asegúrese de que esa función también sea ajustable. "Si son del tipo fijo, a menudo evitarán que alguien se acerque lo suficiente a su superficie de trabajo", dijo.

Si bien puede ser fácil examinar las características de una silla en línea, Miller recomienda ir a una tienda y sentarse en una. "Cuando nos sentamos en una silla, a veces se puede sentir muy bien o puede sentirse un poco incómodo hasta que se ajusta de nuevo para cumplir con los requisitos del cuerpo de esa persona", dijo. Entrar en una tienda te ayudará a descubrir si el respaldo de la silla toca toda tu espalda y la sostiene. Azoory dice que esta es una característica importante. "Un mito que existe es que debemos mantener nuestra postura sin la ayuda de la silla porque eso de alguna manera fortalecerá nuestros músculos con el tiempo. Nuestros músculos no son realmente, o nuestras articulaciones no están realmente diseñadas para las horas y horas de tiempo que pasamos frente a las computadoras hoy en día", dijo.

Una vez que haya examinado la altura, el respaldo y el reposabrazos, mire el cojín del asiento. Debe tener cinco centímetros de acolchado y ser lo suficientemente ancho para todo el asiento. Esto es vital, dijo Azoory, porque si el cojín de su asiento no cumple con este requisito, ejerce presión sobre la parte posterior de las piernas, donde se encuentran las arterias importantes. "La fricción en el asiento también es bastante importante", dijo Azoory. Si el cojín del asiento es de un material resbaladizo y necesita ajustarse constantemente, eso será agotador para sus músculos, explicó.

Finalmente, si está debatiendo entre tela, cuero o algún otro material, Miller sugiere sillas de tela porque son más transpirables. Sin embargo, menciona, es posible que no sean ideales si comparte una silla con otra persona que quiere tener la capacidad de limpiarla.

Otras consideraciones para su comodidad incluyen reposacabezas y reposapiés. Si bien las personas más bajas pueden encontrar incómodos los reposacabezas, pueden ser beneficiosos para las personas más altas, dice Azoory. "No busques necesariamente un reposacabezas solo porque, ya sabes, parece que completa la silla", dijo. "Es más la espalda la que necesita ser cubierta por tu silla".

Cuando se trata de elegir el reposapiés correcto, Miller dijo que está buscando uno que sea lo suficientemente grande como para sostener sus pies. "No querrás tenerlos colgando de la silla o descansando sobre las ruedas", dijo.

Azoory recomienda una configuración que lo coloque en una postura neutral, lo cual es ideal. Significa que varias partes de su cuerpo están en ángulos de 90 grados. "Entonces, los pies apoyados en el piso y un ángulo de 90 grados entre el pie y la parte inferior de la pierna, 90 grados en las rodillas, 90 grados en las caderas, lo que significa que entre el fémur y el tronco, 90 grados en los codos. ," ella dijo. "Luego vamos desde allí para ajustarnos, según el individuo".

Según Miller, es importante recordar que el hecho de que tenga una gran silla no significa que no deba levantarse durante todo el día. Debe proteger su cuello, espalda y otras partes del cuerpo que pueden ser propensas a la tensión o la fatiga, agregando movimiento frecuente a su rutina.

Es una buena idea moverse cada 30 minutos, dijo Azoory, y esto puede incluir cambiar a diferentes opciones de asientos por períodos cortos. "Entonces, levántate, cambia de posición, pelota, taburete, párate, muévete, solo algo diferente a la postura que has estado asumiendo durante un tiempo. Si eres una de esas personas que se sienten muy cómodas sobre una pelota, entonces probablemente podría sostenerlo por más tiempo", dijo. "Ahora, ¿un taburete o una pelota están destinados a estar cómodos todo el día? Si no tienes respaldo, diría que no. Lo mismo con estar de pie. Diría que no".

Como todos sabemos, dijo Azoory, los seres humanos están hechos para moverse.

Jacqueline Martinz es una escritora residente en Toronto. Su escritura a menudo se centra en temas que afectan la educación, la política, la filantropía y el bienestar animal. Cuando no está escribiendo, a Jacqueline le encanta explorar la ciudad y mantenerse activa con su perro, Oliver.

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